Uno de los temas
más presentes en la Educación actual es el uso de las TIC en educación, en
concreto, la utilidad de los videojuegos para el desarrollo cognitivo y
sensorial de los niños. Hace tiempo que leí el siguiente artículo http://www.dreig.eu/caparazon/2010/11/23/motivacion-y-videojuego/
en el que se hablaba sobre los videojuegos en educación, civismo y periodismo,
y me pareció bastante interesante la idea que daba sobre la aplicación del
elemento motivador que poseen los videojuegos en la educación.
Hablando desde
mi experiencia personal con los videojuegos puedo decir que lo que más me mantiene
enganchado son dos aspectos: la historia y la manera de presentarla, es decir,
lo espectacular que resultan el escenario, los personajes y la interacción
entre ambos. Además, como se dice en el artículo, un elemento muy importante es
la motivación, lo que nos hace avanzar más y más en el juego. El hecho de conseguir recompensas pequeñas cada poco tiempo para luego obtener una mayor es lo que te va empujando a terminarlo. Pero, en mi opinión, no sólo se trata de eso, también es muy importante la estética que el juego presenta, así como el modo de jugarlo (que es lo que al fin y al cabo nos hace comprar el juego). Un ejemplo muy claro de ésto sería el conocido videojuego "Guitar Hero", ya que posee dos elementos que lo hacen verdaderamente atractivo: las canciones son de grupos reales y conocidas (por lo que seguramente muchas te gusten, o descubras canciones nuevas que añadir a tu lista de reproducción) y se juega con un mando-guitarra (es más fácil meterte en el papel de guitar hero). Aquí dejo un vídeo, para los que no lo conozcan:
Estos elementos propios de los videojuegos se pueden adaptar e introducir en la educación para que resulte atractiva y motivadora. Se me ocurre un ejemplo con el área de Conocimiento del medio natural, social y cultural: a la hora de tratar un contenido determinado en clase, como puede ser una época histórica, no tener tan presente la explicación teórica e ir más a lo práctico, en este caso concreto se podría realizar alguna dramatización ambientada en la época o trabajar en la construcción de algunos de los objetos típicos de la época (de ésta manera el escenario de aprendizaje sería más atractivo). Además, con los alumnos de más edad se podría incluso trabajar directamente con videojuegos de estrategia o aventura, ya que muchos están ambientados en determinadas épocas y son bastante fieles a la historia. Pero aquí viene el problema, ya que muchos de ellos tienen cierto contenido violento (otro elemento que hace los viedojuegos muy atractivos para cierto público) y no sólo eso, según algunos investigadores el uso tan temprano y constante de las pantallas puede ser perjudicial para los niños, tal y como se puede leer en un artículo del periódico El Mundo haciendo click aquí.
Para terminar, decir que pienso que el mundo de los videojuegos puede llegar a ser muy útil en educación y que puede ser un elemento que la complemente e incluso pueda llegar a cambiarla, siempre y cuando los videojuegos sean escogidos con prudencia o adaptados adecuadamente. De ellos no sólo se aprenden conocimientos teóricos, sino también valores (que en ocasiones pueden ser negativos, por lo que habría que tener especial cuidado a la hora de seleccionarlos), ciertas habilidades (como el cálculo o la agilidad mental) o incluso aprender a apreciar el arte (los videojuegos constituyen una obra de arte en sí por la historia, por la banda sonora, por los escenarios, los personajes, etc.). En mi opinión, en los videojuegos tenemos un gran punto de referencia para incrementar la motivación del alumnado y encontramos en ellos diferentes elementos que pueden conducirnos al cambio que la educación necesita desde hace mucho tiempo.
Estos elementos propios de los videojuegos se pueden adaptar e introducir en la educación para que resulte atractiva y motivadora. Se me ocurre un ejemplo con el área de Conocimiento del medio natural, social y cultural: a la hora de tratar un contenido determinado en clase, como puede ser una época histórica, no tener tan presente la explicación teórica e ir más a lo práctico, en este caso concreto se podría realizar alguna dramatización ambientada en la época o trabajar en la construcción de algunos de los objetos típicos de la época (de ésta manera el escenario de aprendizaje sería más atractivo). Además, con los alumnos de más edad se podría incluso trabajar directamente con videojuegos de estrategia o aventura, ya que muchos están ambientados en determinadas épocas y son bastante fieles a la historia. Pero aquí viene el problema, ya que muchos de ellos tienen cierto contenido violento (otro elemento que hace los viedojuegos muy atractivos para cierto público) y no sólo eso, según algunos investigadores el uso tan temprano y constante de las pantallas puede ser perjudicial para los niños, tal y como se puede leer en un artículo del periódico El Mundo haciendo click aquí.
Para terminar, decir que pienso que el mundo de los videojuegos puede llegar a ser muy útil en educación y que puede ser un elemento que la complemente e incluso pueda llegar a cambiarla, siempre y cuando los videojuegos sean escogidos con prudencia o adaptados adecuadamente. De ellos no sólo se aprenden conocimientos teóricos, sino también valores (que en ocasiones pueden ser negativos, por lo que habría que tener especial cuidado a la hora de seleccionarlos), ciertas habilidades (como el cálculo o la agilidad mental) o incluso aprender a apreciar el arte (los videojuegos constituyen una obra de arte en sí por la historia, por la banda sonora, por los escenarios, los personajes, etc.). En mi opinión, en los videojuegos tenemos un gran punto de referencia para incrementar la motivación del alumnado y encontramos en ellos diferentes elementos que pueden conducirnos al cambio que la educación necesita desde hace mucho tiempo.
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